miércoles, 25 de noviembre de 2015

Técnicas secretas de ninja diplomático

Perdón por el título chorra, pero no me apetecía otra cosa. Para evitar malentendidos diré que nada de lo que voy a poner aquí es secreto y, ciertamente, poco tiene que ver con el aspecto diplomático del juego. Esto vienen a ser “trucos” para rendir mejor a nivel táctico. No te garantizan ganar la partida ni mucho menos, pero sí ayudan a vender caro el pellejo y hacer las cosas difíciles algo más fáciles. Todo lo que sigue lo puede deducir cualquiera simplemente leyendo las reglas, pero con cierta frecuencia se escapa a los que empiezan a tomar contacto con el juego.

Anular apoyos. Esto es bastante común y si llevas jugando tiempo a Diplomacia y no sabes cómo va mejor que busques otro juego más acorde a tu nivel… un parchís o así. Si lo controlas bien por ti, pero ¿has probado a llevarlo al extremo? Les dejo algunos ejemplos.






Autoenfrentamiento. Es quizá de los “trucos” el más conocido. Es bastante humillante, tanto para el que no lo conoce, como para el que lo acaba de aprender.  Según las reglas de resolución de conflictos, lo que se busca con este pedido de órdenes es mantener a alguien fuera de un espacio, pero sin que haya interés en ocuparlo uno mismo. Otra circunstancia en la que resulta útil es cuando se quiere defender tanto la región de destino como la de la unidad. El problema es que para chafarnos el plan, el rival solo tiene que apoyar uno de nuestros ataques. Lo veréis mejor en los ejemplos.



La cobra acuática. Este suele ser una herramienta de poco uso por lo infrencuente de las circunstancias que la exigen. Aún así, en vuestras muchas partidas es posible que tal cadena de acontecimientos vean la luz. Os gustará tener esta opción en vuestro arsenal. Lo que se explota es la excepción a la regla que impide a dos unidades que se atacan mutuamente intercambiar las posiciones: el convoy.


Como se ve en el ejemplo. Austria lo tiene muy mal para salir del atolladero. Puede defender sus centros, pero tan pronto como caiga Albania (que caerá), el resto se vendrá abajo. Con esos movimientos, Turquía se asegura que Austria no puede tomar un contraataque en Serbia ni mantener su plaza en Albania sin sacrificar Budapest o eso creía porque ¡Austria ha terminado cogiendo Grecia! Insisto, no es lo más frecuente, pero sí es de las más divertidas.

El fuego amigo es una de las formas más prácticas de salvar los muebles con pocas unidades. Básicamente aprovecha la regla que impide a las unidades de una potencia desalojar a otras. Los que de verdad dominan el arte de anular apoyos sabrán el riesgo que se corre al decidir anular un apoyo enemigo en lugar de dar apoyo a una unidad amiga. Por supuesto,  los jugadores buenos solo lo hacen en los casos en los que no queda más remedio, pero la principal desventaja de anular apoyos es que al ser una orden de movimiento, la unidad que anula no puede ser apoyada para mantener la posición. ¿Qué ocurre cuando necesitamos que esa unidad anule un apoyo, pero a la vez está en riesgo de ser desalojada por otro ataque? El fuego amigo puede ser su salvación.


En esta situación en la que Austria (otra vez) va mal, el problema está en que carece de unidades para defenderse de ambos ataques, en principio. A lo sumo tendría que elegir entre qué centro salvar. El avance turco desde Grecia no es casual. Al tratarse de un ataque combinado, corre el riesgo de que Austria decida no defender y esperar a los desalojos para colarse en Bulgaria. Por esa razón, Bulgaria debe apoyar, pero podrían existir otras razones como tiranteces con Rusia, lo que se quiera. Tampoco es necesario que sea un ataque combinado. Todas las unidades enemigas podrían ser turcas o rusas, eso da igual. Al atacar Bulgaria, Austria está salvando Serbia, pero ahora Rumanía no puede ser defendida. Sin embargo, un ataque de fuerza igual al ruso lo mantendría fuera y Austria puede hacer ese ataque sin problemas y si, por lo que fuera, el ruso no atacase Rumanía (digamos que le convencimos de que no lo hiciera), no nos desalojamos por lo que Serbia seguiría ocupada y Grecia no podría entrar. El ataque debe ser desde Serbia, obviamente, para no perder el apoyo y que todo se vaya al traste. ¿Resolviste alguna vez tus problemas de una forma tan original? Lo mejor es que esta situación es más frecuente de lo que cabría esperar así que habrá ocasión de lucirse, echarse unas risas y acoger todo el odio que puede emanar de un rival frustrado.

Lo dicho. Nada de esto es secreto ni mucho menos. Lo único que se necesita es un dominio de las reglas y una visión creativa tanto de las reglas como de las circunstancias. Buena suerte en vuestras próximas partidas. Y gracias a Catán por recordarme la existencia de este blog. A ver si con un nivel publicación algo menos ambicioso puedo mantenerlo ;)

5 comentarios:

  1. De nada! Muy interesante lo del Fuego Amigo. Arriesgado pero muy bueno para salvar situaciones de 4 contra 3.

    Vi la nueva entrada cuando entré ayer a buscar algo de info sobre la táctica Lepanto.
    Pues eso, te animo a que sigas de vez en cuando escribiendo algo.

    Una pena que el servidor en español ya no exista, por lo que tenemos que quitarnos el gusanillo en el inglés. A ver si te veo por allí. Mi nick, Catan, of course.

    Saludos!

    ResponderEliminar
  2. Muy buenas. Llevo unos seis meses jugando al Diplomacy en una app llamada Droidippy y este post me ayudó muchísimo en su día. Son conceptos que no se explican en la FAQ. Recuerdo que en una partida de newbies les di un palizón cruel ya que manejaba estos movimientos algo más avanzados. Muchas gracias, por cierto.

    Cuando llegas a fases en las que controlas muchas unidades (12 o así) y te enfrentas a jugadores expertos, hay que tener mucho cuidado de no pifiarla, revisar una y otra vez los movimientos, y tratar de ponerte en el peor escenario posible para ti y cómo enfrentarlo.

    El fuego amigo es especialmente útil. Muchas veces me ha salvado el culo, o al menos he podido hacer ese movimiento cuando no estaba muy seguro de algún aliado con una unidad adyacente a uno de mis centros con algunas unidades enemigas más.

    Cambiando de tema, me gustaría hacer una petición; ¿podrías hacer un post sobre cómo jugar con Alemania? Para mí es la nación más difícil y divertida con que la jugar, y me encantaría leer tu opinión.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Hola, amigo. Tengo una duda sobre el fuego amigo. En una partida en la que soy Italia, he movido a Serbia (posesión austriaca), apoyado por A Budapest (austriaco). En Serbia se encontraba un ejército austriaco el cual movió a Bulgaria para cortar el apoyo que el ejército allí estacionado brindaba a Grecia.

    Creía que al ser mi ejército extranjero, no habría el efecto fuego amigo y Serbia sería mía. Sin embargo, al pasar la fase, aparece en la pestaña de Resultados que el movimiento no funcionó porque A Serbia no pudo mover a Bulgaria, es decir, que se produjo el efecto fuego amigo a todos los efectos.

    Mi pregunta es, ¿es esto correcto? ¿Se produce aunque únicamente la nación poseedora de la unidad que está en la provincia "atacada" dé apoyo y el ejército que avanza contra ella sea extranjero?

    Gracias de antemano.

    ResponderEliminar
  4. Podría equivocarme, no tengo las reglas del juego ahora mismo a mano, pero si no recuerdo mal, es correcto. Un ejército no puede ser desalojado por ejércitos de la misma nación, ni por ataques apoyados por ejércitos de la misma nación.
    Comprueba que la razón no es otra, por ejemplo que el austriaco no apoyara tu ataque, pero que yo sepa eso no hubiese cambiado nada.

    ResponderEliminar